Por José Romero
1. Lucha de clases y marxismo
1.1 El marxismo: ciencia de la historia
La tesis básica que Althusser defendió fue la de que Karl Marx y Friedrich Engels fundaron una ciencia, la ciencia de la Historia o materialismo histórico. La ciencia fundada por Marx y Engels tiene como objeto de estudio la historia de las luchas de clases a nivel económico, político e ideológico, y como finalidad, la de transformar, por medio de la lucha política, una realidad social caracterizada por la explotación y la dominación de unas clases sociales sobre otras, en una sociedad sin clases en la que la riqueza material y cultural esté al servicio de la sociedad entera y no al de los intereses de una minoría dominante.
"Si se me pidiese que resumiese en algunas palabras la Tesis esencial que he tratado de defender en mis ensayos filosóficos, diría: Marx fundó un ciencia nueva, la ciencia de la Historia. Y añadiría: este descubrimiento científico es un acontecimiento teórico y político sin precedentes en la historia humana. Y precisaría: este acontecimiento es irreversible".(Elementos de autocrítica, 1972)
El marxismo apareció durante el desarrollo del capitalismo industrial, a mediados del s.XIX. El capitalismo industrial fue el resultado de la conjunción de tres factores. En primer lugar, la Revolución Industrial, es decir, la invención de maquinaria que, por primera vez en la historia, no usaba ni energía humana ni animal (primero carbón, luego electricidad y petróleo), lo que aumentó enormemente la productividad del trabajo. En segundo lugar, la aparición de grandes masas de campesinos expropiados violentamente de sus tierras por grandes terratenientes (con el fin de usarla para ganadería, cacerías, etc.) sobre todo en Inglaterra y el centro y norte de Europa. En tercer lugar, la aparición de una nueva clase social, la burguesía, compuesta por hombres (fundamentalmente terratenientes), que habían acumulado gran cantidad de dinero (mediante el tráfico de esclavos y el comercio colonial) con el que adquirieron maquinaria, talleres y minas. De ese modo, los campesinos expropiados sin trabajo, emigraron masivamente a las ciudades, en donde fueron empleados como obreros asalariados por los primeros capitalistas para trabajar en sus talleres, fábricas y minas; formando la clase obrera asalariada o proletariado.
Las condiciones de trabajo del primer proletariado eran extremadamente precarias: bajos salarios, jornadas de 16 horas, falta de condiciones higiénicas, trabajo infantil, ausencia de derechos laborales, etc. Todo ello dio lugar a las primeras luchas obreras en contra de la explotación que sufrían por parte de la burguesía o clase capitalista.
Las primeras luchas obreras de principios del s.XIX se caracterizaron por su desorientación (por ejemplo, hubo movimientos de obreros, como el "luddita", cuya lucha consistía en destruir las máquinas sobre las que trabajaban, al considerar que eran éstas, y nos sus propietarios quienes les explotaban). En ese ambiente, surgieron intelectuales que intentaron organizar y guiar eficazmente las luchas obreras (Babeuf, Saint-Simon, Owen, Blanqui, Proudhon, Bakunin, Kropotkin, etc.). Entre dichos intelectuales, destacaron dos filósofos de lengua alemana: Karl Marx (1818-1883) y Friedrich Engels (1820-1895), quienes, a partir de la cultura filosófica y económica de su época (la filosofía alemana de Hegel y Feuerbach, la economía política de Smith y Ricardo y las teorías socialistas de Saint-Simon y Fourier), elaboraron el marxismo, la teoría que de forma objetiva y racional explicaba los mecanismos de la explotación económica y dominación política e ideológica que la clase capitalista hacía sufrir al proletariado. La adopción del marxismo por la mayor parte del movimiento obrero organizado (a excepción del anarquismo, que siguió la línea de Bakunin), dio lugar a la fundación de los primeros sindicatos y partidos obreros.
"Pues el proletariado vive bajo las ideas de la clase dominante, tanto directa (Iglesia, Estado), como indirecta (escuela, sistema político, etc.). Si quiere conquistar un poco de independencia, en su rebelión, comenzará por servirse de las ideas a las que ha sido sometido: tal es el caso de las ideas religiosas, como en la Guerra de los Campesinos guiados por Lutero en Alemania; luego las ideas morales o jurídicas, como en las primeras formas del socialismo; luego las ideas políticas burguesas (libertad, igualdad), etc. Y como cada una de las rebeliones que se levantan bajo la bandera de estas ideas termina siendo derrotada, el trabajo de resistencia y reflexión es largo, y el pueblo acaba por buscar otras ideas o creer en las de la burguesía. Poco a poco, llega a entrever que estas ideas son engañosas y que están destinadas a engañarlo; entonces se lanza a la búsqueda de ideas que les sean propias, únicamente de él, y que sean adecuadas para liberarlo de la servidumbre ideológica de su adversario de clase. Termina por encontrar estas ideas en obras de intelectuales, miembros comprometidos con el movimiento obrero combatiente de su época; primero en Owen, luego en Proudhon y Bakunin, finalmente en Marx y Engels: en la teoría marxista."(Iniciación a la filosofía para los no-filósofos, 1975)